Por qué me deshice de todos mis libros (y qué tiene que ver esto con vender por email)

the game

Hace unos días tomé una decisión que para mucha gente parecería drástica, incluso exagerada. Me deshice de todos mis libros.

 

Literal.

 

Todos. Algunos me costaron bastante dinero, otros me los trajeron desde otros países, y no faltaban los que había leído varias veces y subrayado como si fueran mapas del tesoro. Pero se fueron. Todos. Y no lo hice por despecho ni por necesidad.

 

Lo hice por elección. Por una palabra que he ido entendiendo con los años, pero que últimamente me ha transformado por dentro y por fuera: simplicidad.

 

Desde hace tiempo he estado practicando una vida más minimalista. Una vida donde todo lo que poseo cabe en una sola maleta.

 

Unas cuantas prendas. Un par de zapatos. Mi computadora. Mi teléfono. Y ya. Vivir así me ha dado libertad, claridad y, sobre todo, enfoque. Pero había una cosa a la que me aferraba con fuerza, casi con culpa: mis libros.

 

El apego a los libros tiene algo curioso. No solo acumulas papel, también acumulas ideas no aplicadas. Versiones pasadas de ti.

 

Recuerdos de quien eras cuando leíste eso. Y aunque parezca romántico, llega un punto donde cargar con tantas ideas sin ejecutar es un lastre.

 

Así que un día abrí la caja donde estaban guardados, respiré hondo y comencé a despedirme. Uno por uno. Hasta que solo quedó uno en mis manos. Uno que no solo sobrevivió a la purga, sino que me recordó por qué hago lo que hago.

 

Ese libro es El Rinoceronte, de Scott Alexander.

 

Lo leí hace años, pero hasta ahora, en medio de este proceso, conectó conmigo como nunca antes. Y no porque sea un libro profundo, lleno de fórmulas, citas o rituales espirituales. No.

 

Es un libro brutalmente simple. Su mensaje es directo, sin rodeos: si quieres tener éxito, actúa como un rinoceronte. Carga. Arremete. Haz lo que tengas que hacer. Sin excusas. Sin listas de metas decoradas. Sin despertarte a las 5 de la mañana si no quieres.

 

Solo haz lo que funciona. Punto.

 

Y aunque puede parecer una filosofía simplona, te diré que en el mundo del email marketing —y en los negocios en general— pocas ideas son tan efectivas como esa.

 

Porque cuando escribes correos todos los días, cuando vendes con palabras, cuando apuestas tu ingreso a la consistencia de tu mensaje, te das cuenta de que no necesitas fórmulas rebuscadas ni estructuras que parecen tesis universitarias.

 

Necesitas claridad. Velocidad.

 

Coraje. Necesitas escribir el correo aunque no te sientas inspirado. Necesitas hacer la oferta aunque pienses que “aún no es el momento”. Necesitas dejar de procrastinar el pitch perfecto y simplemente mandar el email.

 

Eso, querido lector, es actuar como un rinoceronte.

 

Y lo he comprobado. Cuando mando correos con esa energía, las respuestas llegan. Los clics suben. Las ventas ocurren.

 

¿Por qué? Porque la gente no responde a la perfección técnica. Responde al impulso. A la intención. A la seguridad. A la fricción bien colocada.

 

A la urgencia emocional que un rinoceronte en movimiento transmite, aunque el texto no tenga la mejor puntuación ni el diseño más bonito.

 

Por eso ahora solo trabajo con clientes que entienden esto.

 

Gente que no quiere decorar su negocio con frases bonitas, sino vender más con correos que cargan directo al punto. Dueños de negocio que no temen hacer lo necesario para crecer.

 

Emprendedores que no se paralizan por el qué dirán, ni por el “necesito pensarlo más”. Personas que actúan. Rinocerontes.

 

Y si tú te identificas con esa energía —no importa si vendes servicios, cursos, productos físicos o suscripciones— y quieres convertir tu bandeja de salida en una máquina de ingresos, entonces tengo algo para ti.

 

Está dentro de un sistema que diseñé para entrenarte en el arte de vender por correo sin excusas, sin distracciones y sin bullshit.

 

Lo llamo THE GAME, y es para los que están listos para embestir. No para los que quieren seguir acumulando libros, esperando a sentirse “preparados”. Si quieres entrar, ve ahora a www.dongabo.com y únete.

 

Don Gabo.

Ingresa a The Game y Aprende Email Marketing de Alto Nivel
The Game es la legendaria secuencia de bienvenida de Don Gabo "El Tital del Email" donde enseña sus mejores trucos para vender High Tickets por Email.

Al suscribirte aceptas recibir emails donde te vendo.