Cómo usar tu historia de fracaso para vender más (como lo hizo mi socio millonario)
Hace relativamente poco tiempo, uno de mis mejores amigos y también mi socio, Juan, se fue a la quiebra.
Literalmente.
Cero.
Truene total.
Su empresa, que ya estaba generando seis cifras, colapsó en cuestión de semanas.
Recuerdo con claridad el primero de marzo, el día que tuvo que despedir a todo su equipo.
Yo incluido.
Fue un golpe duro, tanto para él como para todos los que estábamos a su alrededor.
Y sin embargo, hoy Juan es millonario.
Y si todo sigue su curso, yo estoy a punto de serlo también (con el favor de Dios, como decimos en México).
¿Cómo sucedió eso?
Entre ese colapso financiero y su primer millón, Juan no se encerró a llorar ni a maldecir al sistema.
Se puso a trabajar.
Empezó a lanzar productos digitales, a asociarse en proyectos de bienes raíces, y a diseñar campañas de venta que conectaban con la audiencia desde un lugar muy humano: su historia.
Sí, su historia.
La de cómo se fue a pique.
La de cómo perdió todo.
La de cómo volvió a empezar.
Y, sobre todo, la de por qué lo hizo.
Cada vez que se paraba frente a un público —ya fuera en un evento en vivo, un webinar, un email o una página de ventas—, Juan contaba su relato de marca.
Sin adornos.
Sin fórmulas mágicas.
Solo la historia real de un hombre que quebró y se reconstruyó.
¿Y sabes qué pasaba?
Cada vez vendía más.
Cada lanzamiento que hacía con esa historia como punto de partida, generaba más ventas, más atención, más conversión.
Porque la gente no conecta con fórmulas.
Conecta con personas.
Y cuando cuentas tu historia de forma honesta, estratégica y bien contada, tu lector no solo te escucha.
Te cree.
Y cuando te cree, te compra.
Esa es una de las lecciones más poderosas que puedes aplicar en tu marketing por email.
Tu historia, bien narrada, puede ser el arma más potente para construir confianza y aumentar ventas.
No necesitas tener una historia trágica para usar esta herramienta.
Lo que necesitas es claridad sobre tu “por qué”.
¿Por qué haces lo que haces?
¿Por qué empezaste?
¿Por qué sigues?
Y si sabes contarlo con intención, tu historia puede transformar simples correos en una verdadera fuerza de ventas.
Esta semana en mis correos he estado hablando del relato de marca.
Y mañana será el último día que toque este tema.
Pero antes de cerrar este bloque, quiero que lo reflexiones:
¿Estás contando tu historia en tu negocio?
¿Estás usando tu email para compartir algo más que promociones?
¿O solo estás llenando la bandeja de entrada con contenido genérico que cualquiera podría escribir?
Porque si no cuentas tu historia…
Alguien más va a contarla por ti.
Y créeme, no lo hará tan bien como tú podrías hacerlo.
Para que veas cómo se aplica esto en la vida real, te dejo este podcast donde mi socio Juan cuenta su historia en público.
Escúchalo con atención.
No para copiar lo que dice, sino para entender cómo lo dice.
Y si quieres aprender cómo usar tu historia personal para vender por email, incluso si aún no has facturado ni un solo peso, entonces te invito a entrar a THE GAME.
Ahí te muestro cómo convertir tu relato de marca en una serie de emails que no solo conectan, sino que venden.
Emails que entretienen.
Emails que posicionan.
Emails que convierten.
THE GAME no te da plantillas vacías.
Te da el mapa completo para construir un sistema de ventas basado en tu historia, tu oferta y tu voz única.
Todo sin mostrar tu cara.
Todo usando solo texto.
Porque eso es lo que hacemos aquí:
Convertimos historias reales en negocios rentables… una palabra a la vez.
Puedes entrar aquí:
Don Gabo.
Ingresa a The Game y Aprende Email Marketing de Alto Nivel
Al suscribirte aceptas recibir emails donde te vendo.